Estimado Christian,
Tuve el agrado de
compartir contigo – juntamente con los demás colegas latinoamericanos presentes
en Kuala Lumpur (MALAYSIA 2014, del 1
al 6 de diciembre de 2014) hace poco más de año y medio – tu enorme felicidad
por haber conquistado tu primera medalla de Vermeil Grande (85 p.), motivo de
júbilo no solo para ti sino también para tus varios amigos y docenas de juveniles
a quienes incentivas, con tanta dedicación, a que sigan cultivando la
filatelia.
Christian Pérez, orgulloso con
su primer Vermeil Grande
(Malaysia 2014, diciembre de
2014)
Tú estabas contento,
además, porque ese laurel te había sido otorgado en una exposición mundial temática
especializada de categoría FIP, y creías que la evaluación de tu trabajo, en un
certamen con tales características, pudiera representar un indicativo de que
estabas “en el camino correcto”, y que habías hecho bien en incorporar los
consejos recibidos de varios jurados temáticos que juzgaron tu colección en ocasiones
anteriores.
Estabas también
preocupado por cómo te saldrían las cosas para el futuro, o sea, al momento de
pasarla a los ocho marcos, toda vez que el tema Scout tiene sus propias
singularidades.
Pero con el
entusiasmo propio de los buenos competidores quisiste poner, una vez más, tu
colección a prueba, aún con cinco marcos, pero introduciendo cambios “para
mejor” y eliminando partes que pudieran representar “puntos débiles” (que los
hay en todas las colecciones). Por eso precisamente la inscribiste, con
ilusión, para NUEVA YORK 2016.
Y el resultado no
pudiera haber sido más desastroso: sin ternura alguna (si es que el consejo de
tu compatriota pudiera valer también para evaluaciones filatélicas), te
quitaron siete puntos, te rebajaron dos medallas, en síntesis – como se dice en
el lenguaje popular – te “rompieron las piernas”, te “cortaron las alas”... Un
Vermeil, por lo menos, te hubiera bastado para seguir con tus legítimos planes
de un día ser jurado FIP en Juventud.
Comparto,
solidariamente, tu dolor, de la misma forma como varios de tus colegas que ya
han pasado por la misma experiencia en este nuestro confuso mundo de las
evaluaciones temáticas que se hacen a nivel “superior”, donde parece haber
criterios mejor que otros, jurados mejores que otros, “team leaders” de primero
y segundo nivel...
Sin duda, una
lástima, algo que solo viene en detrimento de la filatelia temática
competitiva, que parece ser la única clase que está marcada por la
incertidumbre en cuanto a los resultados de los juzgamientos más que otras
clases filatélicas: nunca se sabe qué puede venir, qué se puede esperar…
A remolque de esta tu
ingrata experiencia en Nueva York, hay otras cuestiones – indisociables, ya que
eres también Jurado Temático y Juvenil FIAF, además de Presidente de la
Comisión de Juventud FIAF – que tienen que ver con lo que realizas como “obrero
de la filatelia” en esta parte del mundo. Por varios años, vienes tratando de
diseminar la afición, de atraer juveniles y adultos para el hobby, llevándolos
también a la filatelia competitiva. De buena fe, les has enseñado que las
evaluaciones temáticas se pautan por criterios justos, correctos, ecuánimes…
¿Con qué cara les vas
a mirar ahora a los ojos, para repetir esas mismas cosas, si las marcas del inclemente
látigo todavía arden sobre tus propias espaldas?
Puedo imaginar,
querido amigo, también otros tipos de dudas que deben estar pasando por tu
cabeza. Como decía Shakespeare (en la boca de Romeo), “se ríe de las cicatrices
aquel que nunca ha sido herido”. Llevarás las marcas de esta triste
experiencia por algún tiempo más, y puede que las heridas te vuelvan a doler en
otras ocasiones, como evidencia del duro camino que todavía tenemos que seguir
con la Temática que por aquí practicamos. Pero eres joven y te animo a seguir
en la lucha, con la certeza de que ese infortunio de Nueva York en nada
disminuye el respeto que tenemos por ti, ni tampoco en valor de tu colección y
de tu trabajo ante los ojos de tus hermanos de América que – tenlo por seguro –
“los tienes tantos que no los puedes contar”.
Con el cariño de
siempre,
Luiz Paulo Rodrigues
Cunha
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El autor de esta carta tuvo el agrado y el honor de haber evaluado al
colega argentino Christian Gabriel Pérez en su examen para Jurado Temático
FIAF, que él aprobó con uno de los mejores resultados. También conoce de cerca
su colección temática In the footsteps of
“Impeesa” – The Scouting y el
abnegado esfuerzo que hace su propietario para mejorarla gradualmente.